PRIMER SELLO DENTADO

1854 PRIMER SELLO DENTADO

El sello de un penique rojo “Penny Red”, que era la tarifa por una carta sencilla dentro de Inglaterra en la segunda mitad del siglo XIX, fue el sello más impreso en esos años. Descendiente directo del “Penny Black”, apareció en 1841 en este color para facilitar la labor de matasellado pues el anterior color negro daba poco contraste a las tintas de los matasellos.

En circulación desde 1841, se convirtió en 1854 en el primer sello dentado producido oficialmente. Antes se habían hecho algunas tentativas con sistemas de ruleteado y dentados experimentales, pero fue con la máquina desarrollada por Henry Archer en 1848, que los sellos pudieron emitirse perforados en grandes cantidades. Los sellos eran perforados con dentado de peine. Este primer sello dentado corresponde a la referencia (Sg17) catálogo Stanley Gibbons o bien (Scott 8). Impreso sobre papel azulado con 16 perforaciones y filigrana de una pequeña corona.

Afortunadamente, la patente de Archer fue reconocida como la solución al problema de la separación de los sellos y aunque los primeros sellos de la mayoría de los países que emitieron sus primeros sellos antes de 1870 están imperforados, el sistema se impuso como el método más práctico de separar los sellos.

Cuando se comenzaron a emitir sellos perforados, los filatelistas descubrieron que algunos sellos, aparentemente iguales, eran diferentes por tener perforaciones diferentes. Como un medio para conocer esas diferencias, se comenzaron a contar las perforaciones. El método, sin embargo, además de engorroso resultaba inexacto.

La solución la ofreció el filatelista francés Dr. J. A. Legrand, quien inventó lo que hoy llamamos el odontómetro. Legrand, al tiempo que inventó el odontómetro, estableció la norma de que el número de perforaciones en un sello, era su cantidad en el espacio de dos centímetros.

Los sellos pueden tener el mismo número de perforaciones en los cuatro lados y entonces se dice que son perforaciones sencillas, o estas ser diferentes y en este caso se denominan perforaciones compuestas. Por convención, en las perforaciones compuestas, el primer número corresponde a las perforaciones en el lado horizontal.

Las perforaciones normalmente van desde 5½ (la más vasta) hasta 16½ (la más fina)